domingo, 21 de diciembre de 2008

FRANCO , SISTEMA POLICIAL,1936-1947

El 1 de enero de 1938, se emite una Orden General extraordinaria, editada en Valladolid donde figura como máximo responsable policial el Comisario General de Seguridad Interior, que así se denomina el máximo Organismo Policial, siendo nombrado para el cargo José Medina Santamaría, que en su alocución a los policías reitera los conceptos de disciplina y obediencia, y no apartarse del Reglamento provisional de 25 de noviembre de 1930, editado por Mola. Esta Comisaría General de Seguridad Interior, rubrica en otras Órdenes Generales en calidad de JEFE SUPERIOR DE POLICÍA DEL ESTADO ESPAÑOL, y también como JEFE DEL SERVICIO NACIONAL DE SEGURIDAD, todas ellas emitidas en Valladolid, disponiendo el máximo interés en recuperar objetos relacionados con la masonería.

En la Orden de 31 de marzo de 1938, el Ministerio se denomina de Orden Publico y definitivamente la Policía se etiqueta como Jefatura del Servicio Nacional de Seguridad, disponiendo que se practiquen informaciones rigurosas respecto de policías evadidos a efectos de depuración, advirtiendo a todos los funcionarios la obligación de remitir datos favorables o desfavorables mediante declaraciones juradas a los Comisarios instructores que se designen para instruir aquellas conductas.

El 14 de octubre de 1938, la Jefatura del Servicio Nacional de Seguridad, acepta la distinción de Hermano Mayor Honorario de la Cofradía de Cultos y Procesión de Jesús el Rico, procesionable en Málaga, disponiendo que se ejecute Guardia de Honor por los Cuerpos policiales.

En septiembre de 1938, se organiza la Jefatura del Servicio Nacional de Seguridad y se restablece la Escuela de Policía Española, creando una serie de cátedras que saldrán a concurso. La estructura del Centro Directivo en Secciones es la que sigue: Justicia; Administración y Contabilidad; Personal de Investigación y Vigilancia; Orden Público; Salvoconductos, Extranjeros y Fronteras; Antimarxismo; Información, Antecedentes y Archivo Central; Gabinete Central de Identificación; Personal de Seguridad y Asalto; Parque Móvil y Radiotelegrafía; Brigada Político-Social; y Brigada Móvil que integra los Grupos de Ferrocarriles, de Investigación Criminal y de Extranjeros.

En marzo de 1939, el Ministerio de Orden Público pasa a denominarse de Gobernación, y desde Valladolid, la Jefatura del Servicio Nacional de Seguridad, ordena crear un embrión policial que constituya la Jefatura Superior de Policía de Madrid, disponiendo crear una columna de orden y Policía de ocupación en Madrid, a efectos de intervención de locales y requisas de edificios para establecer servicios mínimos, así como traslado de Jefes de Secciones, entre otros los de la Brigada Político-Social y Brigada Móvil.

Por Decreto de 8 de agosto de 1939, La Jefatura del Servicio Nacional de Seguridad, se denominará en lo sucesivo Dirección General de Seguridad, emitiéndose el 8 de septiembre de 1939 en Orden General extraordinaria, esta nomenclatura. Por una Ley de 9 de septiembre de 1939, que establece funciones depuradoras a FET y de las JONS, se dispone que las Autoridades al hacer a los inculpados las preguntas generales de la Ley, se añadan a ellas, si pertenecen o no al Movimiento de FET y de las JONS, así como en el caso de pertenencia, categoría que ostentan y lugar de adscripción.

En septiembre de 1939, el Centro Directivo se estructura en los órganos que siguen:

• Secretaría General
• Secretaría de Mando y Coordinación entre las Comisarías Generales y la Inspección General de las Fuerzas de Policía Armada y de Tráfico; así como coordinación con FET y de las JONS.
• Comisaría General de Orden Publico.
• Comisaría General de Fronteras.
• Comisaría General de Identificación que establecerá el Carnet de Identidad.
• Comisaría General de Investigación Social.
• Inspección General de las Fuerzas de Policía Armada y de Trafico.
• Jefaturas Superiores que se establezcan.

En octubre de 1940, se recuerda la importancia y significado del saludo nacional, disponiendo que los funcionarios del Cuerpo de Investigación y Vigilancia saluden a sus superiores con el brazo en alto, la mano abierta y extendida con todos los dedos unidos, formando con la vertical del cuerpo un ángulo de 45º, y en igual forma saludarán las Fuerzas de Policía Armada cuando vayan sin armas. En fecha inmediata la Orden General de 9 de noviembre, participa la satisfacción en la Policía española por la visita a España del Reich Furer y Jefe de la Policía Alemana Heinrich Himler, que visitó las plantillas de Madrid, Barcelona, Burgos, Guipúzcoa y Toledo. Más tarde, por la Ley de 22 de febrero de 1941, se otorga un fuero especial a todas las autoridades y responsables, a nivel nacional, provincial y local, de FET y de las JONS, mediante la cual no podrán ser detenidos por la Policía Gubernativa, a no ser en flagrante delito.

La Ley de 8 de marzo de 1941, crea la POLICÍA ARMADA, que será nutrida por los Cuerpos de Seguridad y Asalto. Esa Ley reorganiza los Servicios de Policía, marcando el objetivo de la misma en el sentido de vigilar a los enemigos de España, por lo que se crea una Policía política. Crea esta Ley el CUERPO GENERAL DE POLICÍA, que sustituye al Cuerpo de Investigación y Vigilancia. El Cuerpo uniformado policial se denominará Cuerpo de Policía Armada y de Tráfico. En el artículo 26, se crea la Escuela Superior de Policía para acceso a la Escala Superior; y la Escuela General de Policía para la subalterna y Policía Armada.

En mayo de 1941, la Orden General número 1220, se hace eco del problema de acaparamiento, desabastecimiento y estraperlo que existe en España, y que “ha tocado a la Policía”, manifestando que en la práctica algunos Policías se benefician con la reventa de material ocupado, disponiendo en consecuencia la obligación de entrega de actas o recibos por cualquier decomiso efectuado; y posteriormente, en junio, habiéndose comprobado que algunos policías atienden a otras actividades simultáneas de “habilidades particulares”, se ordena cesen en las mismas, citando entre otras aquellas referentes a representaciones, actos de gestión, comerciales, informes privados, etc.

Son temas preferentes y de interés policial, aparte de los considerados anteriormente en el transcurro de los años cuarenta y cuarenta y uno, la moralidad social, el ejercicio de las buena costumbres, evitación de la obscenidad, persecución de la blasfemia, y el tema del menor, sobre el que se instruyen numerosas medidas y controles, colaborando muy estrechamente la Policía con los Tribunales Tutelares de Menores; y muy especialmente todo aquello referente a la “mujer extraviada”.

En agosto de 1941, es tan apremiante la necesidad de personal en las plantillas policiales que se prescinde de oposición, utilizando el recurso de selección, entre oficiales provisionales y de complemento del ejército, que luego se extenderá a miembros de FET y de las JONS, excautivos, excombatientes españoles y cualquiera que fuere herido con ocasión de la guerra contra la República.

En septiembre de 1941, se organiza y se dan cometidos a las Jefaturas Superiores de Policía, determinando sus jurisdicciones y atribuciones completas, disponiendo, por primera vez, que los Comisarios Generales de la Dirección General, dentro de sus competencias podrán dar órdenes a los Jefes Superiores de Policía, que dispondrán a su cumplimiento.

En 1942, por Ley de 30 de diciembre de 1941, se refunden en las Comisarías Generales de Orden Público y Político-Social las cuatro creadas en fechas anteriores, que pasarán a depender de la Secretaría General, quedando integrada la Junta de Seguridad por el Director, Secretario General, Inspector General de las Fuerzas Armadas y de Tráfico, las dos Comisarías Generales y el Asesor Jurídico.

La situación anormal por la que atravesó España en el transcurso de la Segunda República y el padecimiento de la Guerra de Europa, exige, en 1942, en relación a los pasaportes “ordinarios”, que se expidan sólo a personas que de forma indubitada conste la adhesión al Movimiento Nacional y el afecto al nuevo Estado. En este año se crean las Inspecciones de Servicio del Cuerpo General de Policía en las sedes de las seis regiones policiales, pudiendo visitar las plantillas sin previo aviso, a efectos de dar instrucciones, y también corregir errores.

El nuevo espíritu del Régimen llega a tal consideración que en marzo de 1942, con ocasión de ejecutar la Ley reorganizadora de la Policía de 8 de marzo de 1941, el Centro Directivo dispone cara a una pretensión de eficacia policial que el Movimiento entre en los Servicios policiales de forma que queda garantizada la adhesión inquebrantable de los policías al Movimiento, llegando al punto de que se dispone que la Milicia de FET y de las JONS participará en la ejecución de los servicios policiales cuando así sea requerida por la Policía.

Un Decreto de 14 de octubre de 1942, declara la situación de disponible forzoso en la Policía, por innumerables motivos, quedando al arbitrio de la Superioridad tal situación, creando un problema muy serio en el Cuerpo Policial. El motivo esencial de esta declaración arbitraria se dice que no supone sanción o prejuicio, sino una mayor posibilidad de recursos de personal sin trabas reglamentarias.

Una Orden de 14 de diciembre de 1942, dice que la Guardia Civil, por la última reorganización de 1940, aparte de las competencias propias de resguardo fiscal y Policía Judicial, tendrá el carácter, todo su personal, de AGENTES DE LA POLICÍA GUBERNATIVA, disponiendo en consecuencia su dependencia del Ministerio de la Gobernación, de los Gobernadores Civiles y del Director del Cuerpo.

En 1943, se crea y organiza el CUERPO DE POLICÍA AUXILIAR DE DEFENSA PASIVA, con el objetivo de adiestrar a personas en la vigilancia del tráfico, orden publico, prevención de sabotajes, saqueos, robos y pillajes, vigilancias de locales abandonados, oscurecimientos y alarmas aéreas, bombardeos e incendios. Este servicio será gratuito por dos años renovables, siendo requisito imprescindible de selección carecer de antecedentes desfavorables a FET y de las JONS, que certificará su adhesión al Movimiento. Los Jefes Superiores Policiales, tendrán la denominación de Inspectores Provinciales de este Cuerpo, siendo éstos los que movilizarán en casos de desórdenes públicos; y el Director General tendrá la denominación de Inspector General del Cuerpo Auxiliar de Defensa Pasiva.

Para ser Policía del Cuerpo General en 1943 se exigía conocer el Reglamento Orgánico de la Policía; orden público; derechos de reunión y asociación; Ley de imprenta; pasaportes, cartas de identidad y extranjería, armas; establecimientos y hospederías; prendas y compraventa; espectáculos públicos; y vagos y maleantes. En este año, se reglamenta el uniforme para el personal de Cuerpo General de Policía en sus dos Escalas.

En 1944, se crea la figura del Delegado de la Autoridad Gubernativa para los espectáculos deportivos, siendo éste un funcionario de la Escala Técnica del Cuerpo de Investigación y Vigilancia, en ese momento Cuerpo General de Policía. Este Agente tendrá a sus órdenes a todos los agentes y guardas de servicio y coordinará los delegados federativos. En este año, se crea el Documento Nacional de Identidad, que sustituye a la Cédula Personal como documento de identificación, siendo competente para organizar, dirigir y administrar la Dirección General de Seguridad.

En 1945, se crea la Jefatura Superior de Policía de Granada, con organización similar a las ya creadas; se convocan 600 plazas en le Cuerpo de Policía Armada y Tráfico para los licenciados en el ejército debiendo presentarse a la Academia Especial de Policía Armada de Zaragoza; y se derogan todas las disposiciones que obligaban en la Policía a saludar con el brazo en alto con la palma de la mano abierta, aduciendo entre otras razones, que la Segunda Guerra Mundial ha interpretado torcidamente este saludo, acorde con el texto de la Orden General, de recio abolengo ibérico, con un valor y carácter que no representa; y se armoniza la Ley de Orden Público de 1933 con el Fuero de los Españoles, que es una norma fundamental del Régimen.

En 1946, los opositores al Cuerpo General de Policía tienen que acreditar mediante certificados la adhesión al Régimen, y se hace extensivo al Cuerpo Auxiliar de Oficinas de la Dirección General de Seguridad; por primera vez, se establece de forma reglamentada un Servicio de Vigilancia en los establecimientos bancarios creando así una seguridad privada, al punto que estos empleados de seguridad en el ejercicio de sus cargos tienen carácter de Agentes de la Autoridad; la concepción de Ceuta y Melilla es de entidad internacional, obligándose a los españoles peninsulares para que se provean, cuando se dirijan a esas ciudades, de visados de salida y pasaportes; y se fusiona en el Cuerpo General de Policía, el Cuerpo de Policía de la Zona del Protectorado de España en Marruecos.

En 1947, se adjudica la fabricación del modelo oficial del Documento Nacional de Identidad con unas bases y la Policía es felicitada por su eficaz servicio integral, con ocasión de la visita oficial de Eva Perón a España, que visita varias poblaciones y apoya al Régimen.

FRANCO Y LA POLICIA 1936-1947

El 16 de febrero de 1936, alrededor de un 70% del electorado acudió a las urnas para elegir a 472 diputados. Comparando los datos con 1933, la izquierda pasó de 97 a 264 diputados; el Centro disminuiría de 174 a 64 diputados; y la derecha descendería de 201 a 144 escaños. En términos de votos, el Frente Popular obtuvo 4.356.559 votos, mientras que el Bloque Nacional obtendría 4.570.744 votos. Portelistas, progresistas, independientes del Centro recibieron 340.073 votos; y los nacionalistas vascos 141.137 votos. El resultado de las elecciones, demostró que la CEDA era la fuerza política más entroncada en León y las dos Castillas; perdiéndose Madrid que pasaría a la izquierda, junto a las grandes ciudades, entre otras, Barcelona, Zaragoza, Bilbao, Sevilla, Málaga, Valencia y Murcia. Las Baleares se mantenían como feudo de March, en tanto que Ceuta y Melilla se inclinaban a la izquierda. Las Palmas de Gran Canaria pasó a la izquierda y Tenerife a la derecha. El viejo centro liberal conservador de Lerroux y Cambó, quedó derrotado.

La victoria del Frente Popular estalló en la misma noche del 16 de febrero en diversas zonas del país, promovidas por la CNT que obligó a Portela Valladares a declarar el estado de alarma, abandonando los cargos numerosos Gobernadores Civiles. Portela recibiría ofrecimientos de José Antonio Primo de Rivera, de Gil Robles, de Calvo Sotelo y del General Franco a fin de que proclamara el Estado de Guerra. El día 20 de febrero, Azaña se vio obligado a formar un Gobierno provisional Republicano, esencialmente de izquierdas y en nombre del Frente Popular.

A mediados de marzo, José Antonio Primo de Rivera, es encarcelado y la Falange, proscrita, pasando a la clandestinidad, incrementando su violencia, y atrayendo a sus filas a un número inconmensurable de japistas, movimiento juvenil de la Ceda. En estos momentos, la tensión entre José Antonio y Franco era irreconciliable, negándose José Antonio a formar candidatura en Cuenca junto a Franco, por un comentario insultante realizado por el General respecto de su padre, con ocasión de la guerra de Marruecos.

España, desde febrero a julio, estaba convulsionada, y era creencia generalizada en todos los partidos la existencia de un desorden, pidiéndose por los políticos, con urgencia, garantías de la vida en la calle y advirtiendo de la disolución social y del enfrentamiento inevitable, dividiéndose incluso respecto de actuaciones el liderazgo socialista, unos, como Largo Caballero, que mantenía el principio de la lucha revolucionaria, y otros, como Indalecio Prieto que recomendaba continuamente el sosiego, tranquilidad y orden, no consintiendo una República basada en la anarquía y un ideario libertario. Largo Caballero denunciaría a Prieto como persona que “no sentía las ideas socialistas”. Largo Caballero estaba soportado por la UGT, la Juventud Socialista y la Agrupación Socialista Madrileña. Prieto aventajaba a Caballero debido al control que realizaba en el partido y la dirección del Socialista. En estos meses el resultado es desorganización, odios, indisciplina social, disgresión, a lo que se añade el alimento que hacía Casares Quiroga, Presidente del Gobierno, que reiteradamente manifestaba su odio a la derecha, etiquetándola de fascista, lo que permitió cohesionar más al bloque nacional, que ya agrupaba a todos sus líderes en la idea de alzarse contra la República.

Calvo Sotelo en un debate del 16 de junio, anunció que él participaba de la idea de un Estado fascista e hizo un llamamiento para que el ejército se sublevara contra el Gobierno Republicano, tomando así una clara posición de líder político de la sublevación, siendo advertido por la citada declaración, de la posibilidad de un atentado, hecho que se evidenciaría inmediatamente por su asesinato, ocurrido el 13 de julio y realizado por Guardias de Asalto, aunque liderados por dos Capitanes de la Guardia Civil, que eran estrechos colaboradores de la extrema izquierda. Al momento surgieron movimientos políticos y especialmente militares, entre otros, los reiterados africanistas, Sanjurjo, Mola, Franco, Varela, Yagüe, Cabanellas, a los que se une el General Kindelan, destacándose entre ellos el General Franco que contaba con apoyos prometidos por las Cancillerías de Roma y Berlín, y que ya previamente se lo habían negado a Mola, cabeza visible de Sanjurjo, jefe virtual de la sublevación. Franco, al parecer, se decidió a sublevarse entre el 10 y el 13 de julio, incorporándose a la conspiración aprovechando la trama de un entierro del General Balmes, dirigiéndose a Tetuán, en el Dragón Rapide, donde le esperaba Yagüe, con las mejores tropas del ejército. El 18 de julio se proclamó el Alzamiento Nacional, bajo el ideario de generar una Dictadura militar que impusiera un nuevo orden social y un espíritu nuevo, declarando como objetivo político la conquista de España, aunque no a favor de la monarquía. La proclama de Franco en Canarias, hacía referencia a la restauración del orden y sofocar la revolución dentro de la República, felicitándose la mayoría católica porque estaban en la opinión y creencia de que el Frente Popular era un enemigo de la religión. En cualquier caso la conspiración fue un fracaso completo porque significó la Guerra Civil. El 19 de abril de 1937, en la “zona nacional”, todos los grupos políticos de derechas fueron amalgamados sobre la base de Falange Española Tradicionalísta y de las Juntas Ofensivas Nacionalsindicalistas, siendo su Jefe Nacional el General Franco, que a la vez era Jefe del Gobierno del Estado español, desde septiembre de 1936, siendo investido el 1 de octubre como Jefe del Estado.

El nuevo sistema político iniciado en el transcurso de la Guerra Civil, comenzó prohibiendo todos los partidos de izquierdas o liberales, contribuyendo los grupos conservadores de derechas a la formación de milicias, subordinados al mando militar. Franco desacredita el conservadurismo moderado apostado por la Falange, como principal movimiento político en la zona nacional, que sería la mayor fuerza organizadora de milicias de voluntarios, promovidas éstas por Serrano Suñer, cuñado de Franco, que había sido dirigente juvenil de la Ceda y amigo personal de José Antonio. Franco fusionaría Falange Española con el carlismo y el tradicionalismo, incluyendo los puntos programáticos de aquél partido.

El fin de la guerra no puso fin a la militarización del sistema judicial. El estado de guerra permaneció jurídicamente en vigor hasta el 7 de abril de 1948. Los crímenes políticos serían juzgados por Tribunales militares; Guardia Civil y Policía Armada, serían mandadas por Oficiales del ejército. El 9 de febrero de 1939, la Ley de Responsabilidades Políticas, cubriría todas las formas de subversión y ayudas al esfuerzo de guerra, e incluso los casos de pasividad, incluyendo a todas las personas integrantes de partidos políticos revolucionarios y liberales de izquierdas, pertenecientes a logias masónicas, sindicatos etc.

En 1939, octubre, predominaba ampliamente el estilo fascista, con las invocaciones rituales de “Franco, Franco”. El nombre del Caudillo aparecía en todas las fachadas públicas; su fotografía se colocaba en las oficinas, en los sellos de correos y en la moneda. Franco dirigirá el Estado hasta 1948 como si fuera un ejército, mediante Decretos personalizados; los militares coparán el 46% del Gobierno, y el 38% serán falangistas; el resto, otras familias ligadas a la Iglesia o de lealtades probadas. El Secretario General de FET y de las JONS, será el General Muñoz Grandes, organizador de la Policía de Asalto en la República.

En el periodo 1939 al 42, FET y de las JONS, alcanzaría la cifra extraordinaria de 932.000 militantes, teniendo la responsabilidad de adoctrinar políticamente a la población y en ella se incardinaba la delegación de propaganda del Régimen, así como la infraestructura política de nombramientos de Gobernadores Civiles y Alcaldes, que eran a la vez, Jefes Provinciales y Locales del Movimiento.

La política económica del nuevo Régimen se baso en la autarquía nacional, mantenida con austeridad y sacrificio, interviniendo el Estado, que traería el estraperlo generalizado o mercado negro de productos de subsistencia, que generó acaparamientos, de un lado, y desabastecimiento, de otro. Los datos dicen que 200.000 personas murieron como consecuencia de desnutrición y de enfermedades.

El Régimen con ocasión de la Segunda Guerra Mundial, mantuvo relaciones cordiales con el eje Roma-Berlín, gestionado por Serrano Suñer, proclive al nacionalsocialismo.

Terminada la Guerra Civil y aplastados los grupos y personas políticas contrarias, Franco intentó solucionar los tres problemas internos que discutían su poder: los militares, que reivindicaban la restauración de la monarquía; los falangistas que no aceptaban el liderazgo formal de Serrano Suñer, nombrando las bases un sucesor de José Antonio, Hedilla, desterrado por el Régimen; y los monárquicos, que pretendían la vuelta de Don Juan. Con los militares recelosos o querulantes tales como Queipo de Llano, Franco lo retiró al ostracismo; en la Falange incluyó a un camisa vieja de Valladolid, José Antonio Girón, nombrándole Ministro de Trabajo, destituyendo a Dionisio Ridruejo como Jefe de Propaganda, y nombrando nuevo Secretario General de FET y de las JONS a José Luis de Arrese, emparentado con la familia de José Antonio. Una gran solución para los problemas internos, fue el nombramiento de Carrero Blanco en calidad de Secretario Ejecutivo, que eliminó la actividad de Serrano Suñer. En 1942, surgen problemas entre militares, protagonizado por el bilaureado Varela y falangistas, que produjeron múltiples incidentes en diferentes poblaciones, destituyendo Franco al General Varela del Ministerio del Ejército, obligando a una reorganización ministerial en septiembre, pretendiendo un equilibrio que satisfizo a militares, falangistas, monárquicos y carlistas. De nuevo, en septiembre de 1943, afloró un descontento entre los altos mandos militares que entregarían una carta “impertinente” a Franco, a través del Ministro del Ejército, Asensio, solicitando la dimisión del General. Este complot que coincide con la presumible victoria anglonorteamericana y presiones de los monárquicos favorablemente resuelta por Franco, llevando al ostracismo a todos los desleales y elevando el rango y categoría de sus leales, entre ellos, Muñoz Grandes, García Valiño, Moscardo, Monasterio, etc.

Franco ante un memorándum elaborado por Carrero Blanco, a finales de 1942, expuso en el transcurso de 1943 y 44, en diferentes discursos y transferido a distintas Embajadas su teoría de las tres guerras en curso y de la actitud de España hacia ellas: neutral en el conflicto aliado y Alemania; a favor de Alemania contra el comunismo de la Unión Soviética; y a favor de los aliados contra Japón.

En 1943, los monárquicos y D. Juan instan al General para que restaure la monarquía, después de haberse producido el desembarco aliado en el norte de África. A mediados de 1943, Washington inicia una postura dura hacia Madrid, disolviéndose la División Azul a finales de este año. La política de los aliados en el transcurso de 1944, ya en la última fase de la guerra, se hizo más dura con el Régimen, recomendando en 1945 que las Naciones Unidas rompieran las relaciones con España y su Régimen.

Acabada la Segunda Guerra Mundial, el Régimen era descrito por otros países como la última dictadura fascista. Ante ésta situación obtó por relacionarse más intensamente con notables católicos, con la Iglesia y el Vaticano y restar la influencia de la Falange y legitimar así un posible cambio de Régimen hacia la Monarquía bajo la regencia de Franco, promulgándose posteriormente el Fuero de los Españoles y la Ley de Sucesión.

En 1946, doce de diciembre, la Asamblea de las Naciones Unidas votó la retirada de reconocimiento diplomático internacional al Gobierno español, lo que apiñó más al Régimen, que acusó la influencia comunista y la influencia de un Estado supersónico, enemigos ambos de España, por lo que tuvo que apoyarse en países latinoamericanos, especialmente Argentina, donde Perón ayudó económicamente a España.

La Ley de Sucesión de 1947 declaraba al Estado Español constituido en Reino y que su Jefatura correspondía al Caudillo de España y la Cruzada, Generalísimo de los Ejércitos, Francisco Franco Bahamonde. El futuro Rey debería ser varón, español, católico, más de treinta años y jurar defender las Leyes Fundamentales del Régimen y del Movimiento.

En el transcurso de 1946-1947 la insurgencia guerrillera llegó a su punto culminante, aumentado también la actividad de huelgas en el País Vasco y Cataluña que fueron reprimidas por la Guardia Civil, Policía y el Ejército.